Día 2

Bonjour Paris! Me levanté a las 8 am para desayunar en el hostal e ir hacia Versalles. El desayuno estaba incluidi en los 22 Euros de la habitación y la verdad no esperaba mucho pero me sorprendió. Había café, chocolate caliente, jugo de naranja, cereal, puré de manzana, pan, queso crema, mermelada, mantequilla y azucar. Tu podías tomar lo que quisieras las veces que quisieras, lo cual era excelente. Salí del hotel hacia el metro, y luego a transbordar hacia las lineas de tren que te llevan a las afueras de la ciudad. Llegué a Versalles como en 30 minutos, nada lejos la verdad. Muy caro entrar a ese lugar, me costó más que un día de la habitación, pero valió la pena. La residencia es hermosa, mucha historia. En esos lugares la audioguía es tu mejor amiga. Me di cuenta que la persona más egocentrica que ha existido es Luis XIV, en verdad había como mil pinturas que lo retrataban. Recorrí todo lo que había que recorrer y salí a los jardines. Segundo "wow" de París, qué belleza. En realidad por eso me encantó París, por todos sus espacios verdes, y cómo toda la gente de ahí va a hacer picnics, a leer o a jugar con sus hijos, en realidad era increible. Caminé, caminé y caminé para recorrer los jardines. Después fuí a un segundo castillo, éste más pequeño que era como el lugar donde se iba Luis XIV en verano, por si no fuera suficiente. Quedaba como a 15 minutos caminando. De ida y de regreso, y a ver más jardines y fuentes. Ahí se me fue casi todo el día, regresé a París como a las 4 de la tade. De ahí fui a Notre Dame, muy bonita iglesia, pero después de la del día anterior la verdad no me impresionó tanto. De ahí fuí al museo de Pompideou, que es un museo de arte moderno. Excelente museo, era como marco pero mejor y más grande. En realidad me gustó mucho. Ahí me di cuenta que en verano en París el sol se pone hasta las 9:30 pm. Qué loco. De ahí regrese al hostal. Me conecté para avisar que ya había llegado bien y todo, por que mi celular no agarró señal. Quería salir en la noche, pero si salía iba a regresar tarde e iba a ir todo desvelado al Louvre, lo cual no aplicaba, entonces decidí dejar esas cosas para Alemanía. De igual manera, me bañé, y me dormí como a media noche.