Día 3

Bonjour Paris, de nuevo. A desayunar al cuarto piso del hostal. Desayune lo mismo que el día anterior, en realidad me puedo acostumbrar a este tipo de desayuno. Ahora sí, despues de lavar mis dientes comencémos el día. Ahora la primera parada será el Louvre. Tres cambios de línea pero llegué. Muy práctico, la estación llega directo al museo. Sólo compré la entrada para el museo y no para las exhibiciones, que una era de Egipto y la otra de algún país musulman, pues tal como lo pensé ni tiempo tendría. Fuí por mi guía multimedia que en realidad estaba genial, le ponias el número de la pieza que tenías enfrente y te empezaba a contar todo. Empezamos con los restos del antiguo Palacio del Louvre. De ahí a la colección de piezas Egipcias, de ahí a la pinturas italianas, la Gioconda por su puesto, continuamos con las pinturas españolas, luego las pinturas francesas. Después medio oriente, babilonea, el código de hamurabi por supuesto, después a las esculturas. Los esclavos de Miguel Angel, después la Venus de Milo, que en realidad debería ser Afrodita por que es griega la escultura y no romana, y luego a una plaza con esculturas francesas muy bonita la verdad. Después a tomar fotos a fuera del museo, y en los patios. En frente está un segundo arco en París y ahí en frente el mejor parque de París a mi gusto. Es un parque que está entre el museo y la plaza de la Concordia. En realidad se vivía un ambiente muy tranquilo, muy familiar, mucha gente, quizá por que era domingo. Hay varias como lagos pequeños redondos en donde la gente se sienta en frente a leer o a tomar el sol o algo parecido. En realidad me gustaría vivir en París sólo para ir ahí a leer. Después la plaza de la Concordia. De ahí a la iglesia del Dome, muy bonita por fuera. Por dentro no entré, no pensaba pagar 8 Euros para entrar a ver una tumba, la de Napoleón, así que sólo me asumé y ví lo que tenía que ver. Después fui a la Saint Chappelle, y a una prisión antigua que está ahí al lado. Después de todo eso regrese al hostal, quería descansar por que quería salir en la noche y aprovechar el tiempo para ver cómo me iría el día siguiente a Freiburg. Entonces vi trenes, conexiones, me bañé y salí, primero a la Gare de l'Est para sacar la reservación del lugar del día siguiente y después haber que encontraba. Pero los dos planes fallaron, las taquillas estaban cerradas y todos los antros que encontré también, creo que por ser domingo. Por de igual manera me di una vuelta por ahí. La iglesia de Sacre Couer es aún más hermosa de noche. Llegué como a la 1 al hostal y a dormir. Creo que aproveché mi tiempo en París, en verdad una ciudad mágica.